La URT volvió a hacer una de las suyas















Los clubes disputarán tres partidos en apenas ocho días. Conocé la opinión de los jugadores de la mayoría de los clubes tucumanos.
Cuando uno se entera de la planificación que propone la Unión de Rugby de Tucumán, en cuanto a la programación de partidos, tiende a pensar dos cosas: o son demasiado desorganizados para cometer todos los años el mismo error o directamente quieren perjudicar a los clubes chicos. Otra explicación lógica de hacer jugar tres partidos en apenas ocho días no hay.
Poco parece importarles a la URT y a los representantes de los clubes, el estado físico y de salud de los jugadores. Ni los jugadores profesionales, en una copa del mundo, juegan tan seguido en un torneo. Pero en el norte argentino sí, y la Unión de Rugby de Tucumán tiene mucho que ver con eso.
No es la primera vez que ocurre. Todo lo contrario. Pasó en reiteradas oportunidades en los últimos años. La URT organiza un torneo, con calendario prolongado y cuando se dan cuenta, sobre la marcha del mismo torneo, comienzan a amontonar partidos y pasa a no interesarles si los jugadores tienen que trabajar, estudiar o vivir, simplemente, la vida. Son tratados como robots que ponen en la cancha para que jueguen y no se los cuida. Obviamente las decisiones son tomadas desde un escritorio, por personas que no corren ni se golpean, sino lo entenderían un poquito. “¿Qué esperabas? Calculá que jugamos dos fechas y paramos dos meses. Me parece que es muy difícil para el jugador que tiene familia, laburo y una vida aparte del rugby”, largó el máximo referente del Jockey Clubtucumano, Gabriel Pata Curello.
Pero el descontento no sólo es en el Jockey sino que, por el sondeo que hizo Rugby Tucumano, es general en los jugadores. Los clubes más perjudicados son los que tienen planteles cortos y que intentan entrar al Súper 8.
“Desde hace unos años creo que vienen haciendo lo mismo. Repetimos los errores en vez de trabajar y buscarle una solución. No se piensa en la integridad física del jugador”, destacó Agustín Vallejos, jugador de Cardenales. Pero el “Pony” no se quedó ahí y profundizó el análisis: “Hablando específicamente de mi club, capaz otros se sientan identificados también, tenemos un plantel corto que viene de jugar un torneo muy exigente, tanto física como mentalmente (Torneo del Interior). Ahora estamos pagando las consecuencias de tanto desgaste. Tenemos en el plantel 7 lesionados (jugadores importantes), y es una enorme cantidad para nosotros que no tenemos muchos jugadores”. Para finalizar, largó: “Comparando calendario con otros torneos, el tucumano es el más largo y exigente, sin fechas libres, término que desconocen en Tucumán. El protagonista de todo esto es el jugador. Habría que pensar un poco más en su integridad para que pueda representar de la mejor manera a su club y brindar así, un mejor espectáculo”.
“La misma historia de siempre”, arranca con cierto grado de enojo el capitán de Los Tarcos, Leonardo Bevilaqua. “Los errores en la planificación del torneo los terminamos pagando los jugadores, como pasa año tras año. Tres partidos en ocho días es una cosa de locos. Evidentemente el bienestar del jugador no es la premisa en la URT”.
Obviamente, los máximos perjudicados son los clubes más chicos, y Natación y Lince son de los que intentan entrar a la zona de Campeonato. Pero la URT se lo complica más. “Muchos tienen obligaciones que cumplir y más que nada te hace mal físicamente. Ya pasó anteriormente y la verdad que no está bueno y menos a los equipos que tienen que viajar o tienen un plantel corto como nosotros. Pero qué vas a hacer… hay que jugar y dejaremos todo”, destacó Matías López de los Blancos. “Nosotros tenemos un plantel corto en cantidad de jugadores y creo que nos perjudica bastante. En estos casos deberían pensar mejor las cosas porque lo que importa son los jugadores. Justo a nosotros, en éste caso, nos toca equipos muy duros, como Uni, Lawn Tennis y Tucumán Rugby”, reprochó Rodrigo Moyano de Lince.
La opinión de representantes de los clubes más campeones de la provincia no es muy distinta a la de sus colegas. “No se está pensando en el jugador. No es que somos profesionales, que nos entrenamos, descansamos como se debe hacer, ni tampoco vivimos de esto. Tenemos muchas actividades extras, laborales, familiares, y todo demanda tiempo y esfuerzo. No nos recuperamos como se debe y al final del día, los únicos perjudicados somos nosotros”, opinó Nicolás Gentile, tercera línea de Universitario. Lucho Castillo no quiso ser ajeno y tiró su perspectiva, desde lo que se vive en Tucumán Rugby: “Hay que revisar el formato y cambiarlo porque si no te dan los fines de semana para cumplir con todas las fechas, no lo hagas. El rugby de hoy es de mucho desgaste físico y los jugadores corren riesgo de lesiones”.
Pero no nos conformamos con ellos y quisimos la palabra del campeón y para ello buscamos a su capitán, Nicolás Cipulli: “Sin entrar en polémica, está mal jugar tres partidos en ocho días. Ya los partidos se empiezan a sentir más por la altura del año. Creo que no hay descanso suficiente en esa cantidad de días. Encima nosotros viajamos a Salta el domingo”, destacó el jugador de Tucumán Lawn Tennis.
El campeonato va camino a ser uno de los peores de los últimos años. El nivel deseado no es el mismo de los anteriores y mucho tuvo que ver el parate de dos meses que dispuso la URT al inicio del torneo. Los clubes grandes jugaron torneos nacionales y se desgastaron. Los chicos no tuvieron rodaje y de a poco intentan tener un nivel de juego. Esta seguidilla de partidos termina de liquidar a los equipos que tienen planteles cortos, y eso se nota. Por eso se entiende, ahora, claramente, quienes son los clubes que siempre clasifican a la ronda final y quienes pelean por el descenso.

*Crédito: Marco Lamoglia para RUGBY TUCUMANO